L'Isard

El restaurante
que cautiva

El restaurant de L’Isard es un establecimiento familiar fundado en el año 1974 y está situado en el corazón de la capital andorrana, en la siempre activa Avenida Meritxell.

La fachada del edificio en el que se ubica está catalogada de interés cultural ya que forma parte de la Ruta del Granito de Andorra. Desde su fundación y a lo largo de medio siglo, el negocio ha sido gestionado por las sucesivas generaciones familiares que han sabido poner un sello personal a este lugar lleno de historia. Su savoir-faire, el trato personalizado, así como la especial vocación de servicio, fueron y serán, la misión principal de esta casa.

Prepárate para abrir todos tus sentidos

En el restaurant del Isard, nuestro chef, te acercará a una sofisticada combinación de platos tradicionales catalanes y andorranos con pinceladas de cocina francesa en una sublime adaptación de la carta a los productos de temporada. No te pierdas el espectáculo de sabores que tenemos preparado para ti en uno de los restaurantes más valorados de la zona.

El sello de la cocina andorrana

En el Restaurant de L’Isard nos encanta la cocina andorrana y por eso todas nuestras cartas incluyen una selección de recetas locales que son parte del patrimonio gastronómico de Andorra.

Disfruta de la mejor gastronomía local, con productos de proximidad y con todo el sabor de la tradición andorrana y su cocina de alta montaña.

La cocina andorrana es una cocina con sello propio. Condicionada por las estaciones del año, Andorra ha sabido aprovechar la riqueza de su entorno natural para elaborar productos autóctonos de gran calidad de acuerdo a la tradición, como las carnes certificadas, los quesos de elaboración artesanal, las mermeladas de producción ecológica y otros embutidos de alta montaña que han sido utilizados generación tras generación en la mayoría de recetas tradicionales del principado.

Nuestro secreto:
el producto de temporada

Si bien la cocina andorrana recibido la influencia de otras culturas cercanas, como la catalana o la francesa, Andorra ha sabido adaptar el recetario heredado de sus países vecinos a sus propios usos y costumbres, gracias a la utilización de productos autóctonos de temporada que solo pueden degustarse en un momento concreto del año y que son típicos de la zona. Ejemplo de ello son las distintas variedades de setas, como el boletus, los níscalos, las negrillas, las murgas o las senderuelas las cuales se encuentran en cremas y arroces de temporada o como complemento todo tipo de platos. Asimismo, la carne de caza o la trucha cuando llega la temporada de pesca, así como algunas verduras de invierno que se recogen directamente de la montaña el sirope natural andorrano elaborado a base de piñas de abeto, son el secreto de una cocina rica en productos naturales.

Instalaciones
& Servicios

Nuestro local cuenta con diferentes zonas de restauración y ocio con capacidad para más de 100 personas.

Instalaciones

Servicios